dogPor: Fernando Quiroz
Axioma es definido por la Real Academia de la Lengua española como: “un principio fundamental e indemostrable que constituye una teoría” (RAL, 2016). En el caso del psicoanálisis existen diversos axiomas y uno de ellos es que toda conducta es motivada, pero ¿cómo podemos determinar qué factores sustentan esta premisa?
Debido a que el psicoanálisis es una ciencia de la salud se considerarán los tres ejes establecidos por la OMS en torno a este concepto: “Salud es la correlación de las siguientes variables: la biológica, la psíquica y la social” (OMS, 2016). Pero antes de regirnos bajo el principio gestáltico “el todo es más que la suma de sus partes”, haremos una descomposición de estos tres factores para comprender de una manera más general las diversas motivaciones que tiene la conducta.

  • Por lo biológico entenderemos: “la estructura o cuerpo que todo ser vivo tiene para adaptarse y funcionar en su medio” (RAL, 2016).
  • Por lo psíquico nos referiremos a: “toda facultad u operación que permite a un sujeto llevar a cabo una conducta adaptativa” (RAL, 2016).
  • Por lo sociológico abordaremos: “el factor gregario del humano” (RAL, 2016).

Con la finalidad de hacer un trabajo holístico se abordaran las neurociencias y la sociología para complementar la teoría psicoanalítica. Para dar un inicio a este trabajo se mencionaran los descubrimientos hechos por Panksepp en el área de la neurociencias, ya que han arrojado luz sobre los sistemas más básicos del comportamiento humano (Panksepp, 2011). Panksepp ha llegado a la conclusión de que el humano está compuesto por 7 sistemas:

  • Sistema del miedo:

La función de este sistema permite que un sujeto pueda determinar si un estimulo le puede causar un daño, ya sea que la amenaza sea a nivel de mundo interno o externo. Una de las características principales de este sistema es que no se nace teniéndole miedo a ciertos a estímulos, sino que uno aprende a tenerles miedo.
En este último punto la angustia tiene un papel determinante, ya que posibilitará una acción anticipatoria. Sin embargo las respuestas más básicas ante el miedo son: el congelamiento o la huida (Panksepp, 2011).
 

  • Sistema de pánico – duelo:

La diferenciación más evidente que se puede hacer entre el miedo y el pánico es la respuesta que el sujeto pueda tener ante el estimulo adverso. La angustia o la acción anticipatoria son más características de este sistema ya que permiten afrontar esta sensación adversa de una manera más activa que pasiva.
El grado de seguridad que se tenga sobre la respuesta anticipatoria es la que permitirá una mayor adaptación (Panksepp, 2011). Esto último influirá de manera determinante en la vulnerabilidad anímica del sujeto ante los retos de vida.
 

  • Sistema de furia o agresión:

Este sistema se podría caracterizar por dos tipos de respuestas: por un lado se tiene la agresión que busca defender a un sujeto de un estimulo adverso, mientras que el otro tipo de agresión busca atacar al otro con fines de supervivencia o imposición (Panksepp, 2011).
 

  • Sistema de juego:

El juego es una conducta que permite a un sujeto obtener las habilidades sociales propias de su entorno, como lo pueden ser: el cortejo, el dominio, la competitividad y/o paren tajé (Panksepp, 2011). Sin embargo el hecho de salir lastimado durante esta actividad puede llevar a que se pierda el juego y se activen otros sistemas.
 

  • Sistema de cuidado:

El cuidado es una conducta de gran importancia para el ser humano ya que le permite desarrollarse y vincularse con el otro. Es gracias a esta vinculación que se fomenta la complejización de la memoria (Panksepp, 2011).
 

  • Sistema de lujuria:

Este sistema va mas allá de solo procurar la supervivencia de la especie, ya que le permite desarrollarse y vincularse con el otro (Panksepp, 2011). Otros factores que debemos de considerar son el dominio y la ampliación de redes sociales que se dan al tener esta forma de vinculación.
 

  • Sistema de búsqueda:

Este permite motivar y/o dar intención a los pasos que toma un individuo para llegar a recibir una recompensa. La motivación de sus actos puede tener origen en una necesidad o en una ambición del sujeto (Panksepp, 2011). También se debe destacar que en este sistema es donde se originan las estrategias para lograr la meta de una conducta.
 
Debido a que estos sistemas parten de un sustento biológico se podría establecer que estos son universales, ya que todo ser humano tiene estos componentes cerebrales y solo puede surgir anomalías o deformaciones a partir de la interacción del sujeto con su entorno o por una carga genética que altere su funcionamiento cerebral.
Un factor a considerar antes de proseguir con este trabajo es que toda función biológica sustenta las bases limitantes del comportamiento. Se podría decir que el cuerpo es el reflejo más evidente de la adaptación que una especie ha llevado a cabo para acoplarse a su entorno.
Algo innegable de la naturaleza humana es la relación objetal que tiene con el otro. Es por ello que se debe de considerar el factor gregario para el siguiente apartado.
 
En un inicio la sociedad humana estaba compuesta por una autoridad dominante que promovía las creencias y prácticas que beneficiasen mas a la comunidad que en si a sus integrantes (Durkheim, 2007). Estos individuos llevaban a cabo diferentes funciones para promover el éxito de la comunidad, ya que en esta se encontraba la clave para su supervivencia.
Al lograr promoverse cierto orden social y laboral, las comunidades se complejizaron bajo los siguientes tres impulsores: la división del trabajo, los medio de producción y las ideas sociales.
La división laboral llevo a la diferenciación funcional de todos los integrantes que componían una sociedad (Durkheim, 2007). Digamos que hubo una sub especialización de los trabajos primordiales o hubo una nueva necesidad que se veía satisfecha por un nuevo trabajo. Esto provoco que hubiera mayores diferencias individuales en una comunidad que se encontraba más indiferenciada.
Los medio de producción son un factor que pone en uso una de las facultades más evidentes de la especie humana: la capacidad de hacer herramientas (Marx, 1990). Las herramientas se podrían definir bajo su función más básica: son facilitadores de una acción.
Teniendo esto en cuenta nos podemos percatar que la división de trabajo también se daba de forma análoga a las diferentes herramientas que se tenían para llevar a cabo una acción.
Finalmente las ideas sociales son vitales para comprender la complejización de una sociedad. Si la evolución social lleva a una mayor diferenciación individual y laboral, debemos de suponer que las ideas colectivas también cambian de acorde a las nuevas necesidades de la comunidad (Weber, 2001). Estas ideas son las que promueven las instituciones sociales entorno a la convivencia de sus integrantes.
Antes de abordar la perspectiva puramente psicoanalítica me gustaría resaltar un parte aguas en la dinámica social. Si se considera que todo ser humano necesita pertenecer a algo para sobrevivir, la distinción es un factor curioso en la ecuación. Esta fomenta que haya una mayor diferenciación del yo frente al colectivo (Simmel, 1980). Una forma de lograr esto es por medio del reconocimiento de su participación o su jerarquía dentro del grupo.
A manera de introducción a la teoría psicoanalítica se abordara el concepto de aparato psíquico que se podría definir como: “una conjunción de funciones y sub sistemas que permiten a un individuo adaptarse a su entorno” (La Planch & Pontalis, –). Pero antes de proseguir se mencionara que hay un serie de principios que rigen el funcionamiento de esta estructura. Estos principios buscan mantener cierta homeostasis y reducir cualquier tipo de tensión que ponga en peligro al sistema.
Para que un sistema se pueda mantener, este se debe de organizar y debe de emplear su energía interna con la finalidad de adaptarse a los cambios de su entorno o de su propio sistema. Conforme haya una mejor adaptación a la realidad, el sistema se complejizara por medio de la interrelación de sus sub sistemas. Esto implica que el sistema requerirá de mayor energía para mantener su funcionamiento y por lo tanto, habrá un desgaste de esta misma para mantener su estado (UAM, –).
Si mantenemos esta postura, los principios de constancia, de nirvana y de placer solo buscan el mantenimiento de la estructura ante el principio de la realidad y la deformación que este ejerce sobre el principio de inercia. Es en este ultimo donde encontramos las pulsiones, ya que su definición es: un empuje o acción que busca regresar cierta homeostasis al sistema debido a cambios internos o externos (Freud, 1987).
Antes de proseguir con las pulsiones se debe de considerar que todo sistema está predestinado a des complejizarse y que al contener energía esta se desgastara en el mantenimiento de su estructura. Por ello me referiré a todas las pulsiones como funciones necesarias para el mantenimiento del sistema y que en esta búsqueda hay un desgaste inevitable.
Para comprender el funcionamiento de las pulsiones se deben de entender las tres formas de expresión que tiene la energía psíquica: la catexis, la contra catexis y la sobre catexis. En estas últimas dos se hará un énfasis ya que permiten que un sujeto se prepare ante un posible peligro. Pero ¿De dónde surge este peligro?
 
La amenaza puede provenir del mundo interno o del mundo externo de un sujeto. La contra catexis llevara a que se dé una represión y se origine una serie de mecanismos “de defensa” para mantener cierto equilibrio interno. Es en esta represión y su mecanismo “de defensa” que podemos encontrar la representación del conflicto (La Planch & Pontalis, –).
Al saber que toda representación está ligada a un símbolo y que todo símbolo está ligado a una convención social; nos percatamos que la represión y la sublimación permiten que haya una mayor inter conectividad con la otra persona. Se podría decir que la sociedad humana dejo de regirse bajo la búsqueda de supresores somáticos y encontró en el colectivo una forma de transcender su cuerpo.
Antes de llegar a una conclusión se introducirán los conceptos de inconsciente, pre consciente y consciente, ya que nos permiten comprender los diferentes grados de funcionamiento psíquico. Sin embargo para entender las deformaciones pulsionales se deben de introducir las tres estancias psíquicas: el ello, el yo y el súper yo (La Planch & Pontalis, –). Con estas últimas adquisiciones al trabajo se puede empezar a formular una conclusión.
Por un lado se debe de considerar una constante: todo sistema requiere de energía para poder adaptarse a su medio. Es gracias a esta energía que se logran crear ligazones entre sus componentes, pero esta misma unión generara un mayor desgaste en el sistema.
Todo sistema buscara una constancia o una reducción de todo aquello que le produzca una tensión. Es por ello que cada sistema contiene una serie de funciones que le permitirán adaptarse al continuum del espacio tiempo. Sin embargo por procesos de eficiencia, todo sistema será permeable a las experiencias que este tenga con su entorno.
Es gracias a los sistemas propuestos por Panksepp que podemos re plantear el funcionamiento más básico de la conducta, sin olvidar que el entrelazamiento de estos sistemas llevara a que se complejice la emoción y por lo tanto la acción. Estos mismos sistemas se verán influidos por las experiencias y las huellas mnémicas que estos dejen. Este moldeamiento del sistema se dará gracias a las restricciones que el mundo social o el real ejerzan sobre él.
El mundo social tiene una gran relevancia para el sujeto ya que este es el que le garantiza su supervivencia. La estructura que esta tenga permeara la percepción del sujeto y lo llevara a actuar más allá de sus intereses sexuales. En el retraimiento de las pulsiones sexuales y su sublimación, un sujeto puede tener una mayor amplitud de destinos y motivos para sus conductas.
Debido a que este trabajo busca un conocimiento holístico, podemos determinar que toda conducta tiene un motivo, ya sea que la sustente el cuerpo, que la lleva acabo el sujeto o que la permita la sociedad. Sin embargo a forma de aclaración debo de mencionar que la comprensión de una conducta no se hace en torno a un área sino que se deben de tener en cuenta todas las fibras que componen el nudo gordiano de la realidad. Por lo que los motivos de la conducta pueden proceder de cualquiera de las tres áreas de la salud y en ellas mismas también fungen incentivos, facilitadores y obstaculiza dores de la expresión humana.
 
Bibliografía
 

  • UAM ( ) Las tres leyes de la termodinámica. https://www.uam.es/personal_pdi/ciencias/jgr/fisest0506/RepasoTermo.pdf
  • Durkheim, Émile (2007) . La división del trabajo social. Capítulo III La solidaridad debido a la división de trabajo u orgánica
  • Freud, Sigmund (1987) Obras completas Vol 18: Mas allá del principio de placer
  • La Planch, Jean & Pontalis, Jean Bertrand (–) . Diccionario de psicoanálisis
  • Marx, Karl (1990) Transición del mono al hombre
  • Organización Mundial de la Salud (2016) http://www.who.int/features/factfiles/mental_health/es/
  • Panksepp, Jaak (2011 ) The Archaeology of mind: Neuroevolutinary origins of human  emotions
  • Real Academia Española (2016) Axioma, biología, psicología y sociología
  • Simmel, George (1980) La mujer, la coquetería y la moda. Capítulo I La moda: entre lo social y lo individual
  • Weber, Max (2001). La ética protestante y el espíritu del capitalismo. Capítulo II El espíritu de capitalismo