Se dice desde hace mucho tiempo que un hombre “no nace”, más bien “se hace”. En México durante muchos años se ha utilizado el uso de la palabra “macho” como sinónimo del género masculino; porque es importante señalar que género y sexo no son lo mismo. El sexo está ligado a las características físicas sexuales con las que uno nace y el género a aquellas atribuciones culturales que se van construyendo, ya sea en forma de un vestido rosa o de un pantalón azul, por ejemplo.
Porqué en México la figura del hombre de grueso bigote, cara de pocos amigos y pistola en el cinturón continua vigente… Artículo de Montserrat López Lugo en el portal De 10 de El Universal.